Si bien los sistemas de neuronavegación ya son de obligado uso en la patología quirúrgica cerebral, su uso está menos extendido en la cirugía de columna.
Cuando realizamos una fijación (artrodesis) de columna un riesgo potencial es la malposición de los tornillos, cuyas consecuencias pueden ser potencialmente graves si se afecta algún nervio o incluso la médula espinal . Aunque las técnicas que habitualmente se usan en quirófano, como el control con radiología convencional y el registro neurofisiológico intraoperatorio son de ayuda, nada supera a la posibilidad de ver en tiempo real por donde y como entran los tornillos en la columna. Además por medio de estos equipos (O-ARM) podemos planificar la cirugía antes de llevarla a cabo en quirófano, lo cual resulta de especial importancia en casos de alta complejidad como puedan ser escoliosis marcada o casos de malformaciones de la columna espinal.
Mediante la neuronavegación de columna y el intraoperatorio (O-ARM) podemos realizar fijaciones de columna reduciendo el riesgo de lesión neurológica al mínimo, como lo demuestran gran cantidad de artículos existentes en la literatura médica.