En el cerebro humano existen áreas con funciones asociativas que sirven de unión entre las áreas que tiene funciones específicas, estas últimas son las responsables de funciones como el habla, la función motora…. esta característica del cerebro ya fue descrita a finales del siglo XIX, al evidenciar que pacientes que habían presentado cuadros de dificultad para el habla, presentaban en las autopsias, lesiones en la parte anterior del hemisferio izquierdo. Por medio de esta técnica nos proponemos localizar durante la cirugía, o previamente a la misma, diferentes áreas funcionales cerebrales lo que nos permitirá una mejor preservación de dichas áreas y en consecuencia de las funciones neurológicas.
Aunque cuando nos referimos a zapping cerebral, nos referimos a la estimulación eléctrica del cerebro, existen muchas otras formas de localizar áreas elocuentes cerebrales, unas invasivas y otras no, como la resonancia cerebral funcional, la magnetoencefalografia… el objetivo de todas ellas es localizar una zona cerebral determinada con el fin de preservarla.
Técnica:
En algunos casos como en el mapeo del habla, será preciso la colaboración del paciente, por lo que la cirugía deberá realizarse con el paciente despierto, en otros casos, como el mapeo motor puede realizarse bajo anestesia general si bien serán precisas ciertas consideraciones anestésicas y un buen equipo de neurofisiólogos para que el cirujano pueda realizar el procedimiento quirúrgico con éxito .
El fundamento de dicha técnica se basa en administrar una pequeña corriente a la corteza cerebral, lo que hace que durante la estimulación esa zona cerebral no pueda llevar a cabo su función, simulando de esta forma su resección. Si durante la estimulación no se produce déficit podremos resecar esa zona, si se produce bloqueo (imposibilidad para realizar la función) será el criterio del equipo quirúrgico el que debe valorar el grado de resección, ponderando entre la resección incompleta o los déficits neurológicos permanentes.
Indicaciones:
Es de especial utilidad en la resección de lesiones que se encuentran en la proximidad de zonas cerebrales elocuentes, es decir que la desaparición de su función provocan déficits neurológicos importantes. Aunque las neuronas no se regeneran, si que existe el concepto de plasticidad cerebral, especialmente en gente joven. La plasticidad cerebral es la capacidad que tiene el cerebro para reorganizar los circuitos cerebrales, de tal forma que ciertos déficits que se producen al resecar una zona determinada, pueden atenuarse al reorganizarse los circuitos cerebrales.
